El estudio se compone de diferentes fases:
- El interrogatorio, siendo una etapa importante para determinar el motivo de la consulta del paciente.
- Un estudio estático que pretende localizar el o los dolores para realizar un estudio osteoarticular, ligamentario o musculotendinoso. Se mira tanto las articulaciones del pie como de la rodilla o de la cadera. A su vez, se realizará un estudio postural para observar las curvaturas raquídeas y la postura en general (rodilla valgo, rodilla varo, diferencia de longitud, pie plano, pie cavo, hallux valgus...).
- Un estudio dinámico que consiste en observar y analizar al paciente caminando y corriendo. El análisis se realiza gracias a una plataforma técnica podométrica (analiza el centro de gravedad y los apoyos plantares) y a una cinta de correr (analiza los movimientos del paciente).
- El diagnóstico sirve para encontrar la etiología además de la patología. Según el diagnóstico, el podólogo propondrá o no la confección de las órtesis plantares y/u otros dispositivos.
Las principales patologías son:
- Tendinopatía Aquílea
- Fascitis plantar o espolon calcaneo
- Bursitis metatarsal
- Sesamoiditis
- Neuroma de Morton
- Condropatía femoropatelar y femorotibial
- Tendinopatía rotuliana
- Lumbalgia
- Ciatalgia
- Dorsalgia
Las órtesis plantares o plantillas ortopédicas son dispositivos inamovibles hechos a medida. Son recomendables para tratar:
- Dolores musculotendinosos, articulares y de ligamento ya sean localizados en el pie, el tobillo, la rodilla, la cadera.
- Trastornos del equilibrio.
- Trastornos de la postura.
Las plantillas ortopédicas ejercen una acción mecánica y/o postural:
- corrigendo o compensando los trastornos estáticos y dinámicos (pronación, supinación…)
- aumentando la superficie de apoyo del pie
- estimulando los mecanoreceptores